Nabeel Qureshi
Nabeel
Qureshi era un musulmán devoto que empezó a estudiar medicina en
EEUU. Conoció a David Wood, un hombre profundamente religioso, que era su roommate, y Nabeel le dijo lo que a los
musulmanes les suelen decir a los cristianos: “¿Sabes que la Biblia está
corrompida debido a las muchas traducciones?”. A través de la amistad de David y
de diálogos largos, se interesó por el Nuevo Testamento. Juntos buscaron la
verdad y compartieron muchos momentos. David lo invitó a su boda y le hizo
sentir su cariño. Le tomó un año aceptar el Nuevo Testamento porque su amigo
supo argumentar. Los musulmanes creen que Jesús es el Mesías pero lo consideran
hombre. Pero luego: ¿Cómo aceptar que Jesús es el Hijo de Dios? Para ellos eso
es blasfemia. Después de años de estudio y amistad Nabeel se plantea, ¿pero
dónde Jesús dice que él es Dios? Lee: Jesús dice: “Antes de que Abraham
naciera, Yo soy.” Hay que saber que ese es el nombre de Dios y lo dice en
Éxodo. Piensa que esto puede darle otro curso a su vida. Comprendió los
sufrimientos de Cristo, su muerte y resurrección. La Resurrección es la
vindicación de que Jesús es Dios. El Corán no te permite creer que Jesús fue
crucificado. Tardó tres años en convertirse. Su amigo le preguntó: ¿Qué tanta
evidencia tienes de que el Cristianismo es la verdad? Le contestó: El Islam es
para mí 100% aceptable. Sí, pero ponle el aparato crítico que le pusiste al
cristianismo. La vida de Mahoma se escribió 150 años después de que murió y ese
libro se perdió. Le enseñaron que fue un magnifico esposo y defensor de
mujeres, pero cuando estudió las evidencias históricas, vio que era diferente.
Tenía que elegir uno u otro. Bueno, no puedo elegir entre ambas biografías
porque Jesús lo supera, pero ahora falta ver al Corán, palabra de Dios.
Investigó sobre las traducciones del Corán y se le tambaleó. De las
comparaciones viene la claridad. En el Islam, si te haces cristiano deshonras a
tu familia y puedes ser apedreado. Rezó así: “Señor: Necesito que te reveles a
mí.” Los musulmanes esperan que Dios lo hace a través de sueños. Dios le dio
tres sueños, en el segundo se encontraba en la puerta de una fiesta y todos
miraban a otra entrada, allí estaba David. Y le dijo a David: “Pensaba que íbamos
a comer juntos”, yo sabía que estaba en el Cielo pero no podía entrar en la
cena. Le llamé a David y me dijo: Es muy claro, lee Lucas 13, la puerta
angosta. Haz esfuerzo por entrar antes de que llegue el jefe. Luego fue a leer
el Corán, ya no por motivos litúrgicos sino para encontrar una guía personal. Vi
que este libro no se aplica a mi vida. No hay un versículo del Corán que
conforte al hombre herido. Ahora voy a leer el NT y encontré en Mateo las
Bienaventuranzas. Mateo: Quien me proclama ante el mundo yo lo proclamaré.
Ahora encontré fuerza. Pero ¿voy a perder a mi familia? Leo: Quien ama más a su
familia más que a mí, no es digno de mí. ¿Voy a perder mi vida? Y leo: Quien no
pierde su vida y me sigue, no es digno de mí. Me hinqué y recé: “Quiero
seguirte, te doy gracias porque perdonas mis pecados, pero me faltan las
fuerzas”.
Finalmente vio que Dios le
decía: Renuncia a todo. Es lo que hicieron los apóstoles. Sabía que era
deshonrosos para la familia dejar el Islam. Habló con su padre, y, por primera
vez, lo vio llorar; su madre dijo nada. Luego, en su oración le dijo a Jesús:
¿Por qué no me matas en este momento? Y repetí esto, en eso oí: “Porque esto no
se trata de ti, sino de Mí”. Todo cambió. ¡Todo lo veía diferente! Comprendí
que Dios murió por la persona que veía cruzar la calle, entendí que Dios lo
vale todo. Si él quiso morir y deseó morir por personas que lo traicionan,
¿cómo voy a seguir a Jesús? Entendí que, si el Evangelio no cambia tu vida es
que no has entendido. Nabeel explica la mentalidad de los musulmanes, para
poder así conocerlos y ayudarlos. Tiene más de medio millón de visualizaciones.
FUENTE: Libro Seeking Allah, Finding
Jesus, y tiene también un video con el mismo nombre https://youtu.be/k0D8Uz4oQck
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