Hay tesoros de gracia en la Santa Misa
“Ningún padre, ninguna madre, ningún catequista puede poner en el corazón del niño lo que Nuestro Señor le da personalmente en gracias durante la Misa y la Comunión” (María Simma). Si dejamos la Misa del domingo, se va acabando la vida cristiana en nosotros y en nuestra familia. Dice el Papa Juan Pablo II: Cuando el domingo pierde su significado fundamental y se subordina a un concepto secular de fin de semana, dominado por la diversión y el deporte, la gente se encierra en un horizonte tan estrecho que no es capaz de ver el cielo. Vamos a Misa los domingos para dejarnos encontrar por Dios. No basta ser buenos, porque no es posible serlo sin la ayuda del Señor (Papa Francisco). El domingo es día del Señor. No se trabaja. Sólo podemos hacer una cosa en domingo: hacer el bien al prójimo, pero no por lucro. ¿Has ganado algo al trabajar en domingo? Se te descontará con pérdidas en los seis días siguientes. El domingo inaugura tu cielo, tu día de fiesta definitivo, donde tendrá...