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Mostrando entradas de octubre 18, 2025

Princesa árabe

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  La mirada de mi madre se fue apagando porque mi padre la humillaba. Mi padre era rígido, autoritario. Cuando nadie lo miraba yo sabía quién era él. En ese palacio sólo había control, no amor . Mi padre despidió a mi madre, la envió a una casa pequeña detrás del palacio. Mi madre decía: “le fallé”. Empecé a cuestionar mi religión y el trato que se daba a las mujeres. Me aceptaron en una universidad de Estados Unidos, y mi padre me dio el permiso, pero llevaba un acompañante (o vigilante). El consejero tocaba a deshoras para vigilar. Conocí a Sara. Ella nunca me forzaba a nada. Una vez me invitó al campus de la universidad, cerca de Navidad. Allí escuché la historia de Jesús narrada en forma distinta. Lo que escuché sobre la fe cristiana me conmovió. Empecé a leer sobre Jesús, quien no desechaba a los pobres, enfermos, pecadores o desamparados. Una madrugada me sentí vacía, me quité los zapatos, empecé a llorar. De repente ya no estaba allí. Estaba sobre un puente. Había otras ...

Conversaciones que transforman

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  Son aquellas conversaciones en donde hay amistad, respeto, cariño y conocimiento mutuo. Son diálogos profundos y conscientes, a menudo difíciles, que tienen el potencial de cambiar la perspectiva de las personas, las relaciones y el curso de un proyecto o de una vida. Se caracterizan por la apertura, la empatía y la búsqueda de soluciones o de entendimientos nuevos, en lugar de solo informar o debatir. Su propósito es generar un cambio positivo significativo, ya sea a nivel personal o profesional. Una conversación transformadora nace cuando quieres hacerte cargo de lo que te pasa. Piensa, reflexiona, y date permiso para asombrarte de tus respuestas. Cuando conversas de tu vida ¿lo haces desde lo que fue?, ¿lo haces desde lo que pasa en el presente? o ¿lo haces sobre lo que podría pasar? Es esencial saber si tú y tus amigos viven más en el pasado que en el presente, y si tienen esperanza en el futuro. Hay una amiga a la que veo cada quince días que me dice con frecuencia: “S...