El fuego de Pentecostés: el 8 de junio.
Este día de Pentecostés será especial. La llama de Pentecostés descenderá sobre nosotros para purificarnos y darnos poder. En el cap. 2 de los Hechos de los Apóstoles habla de que se reunieron los Apóstoles, pero no sabían lo que iba a pasar, y cómo ese día cambiaría su vida. Un viento llenó la casa donde estaban. Lenguas de fuego se posaron sobre ellos, se volvieron valientes y decididos, salieron a proclamar la fe. Esa llama fue el inicio de la Iglesia. Hay que entender que esa llama sigue viva hoy. Puede transformar nuestra vida. “Derramaré mi Espíritu sobre toda carne” , dice el profeta Joel (2,28). Esa gracia se derrama sobre quienes están dispuestos a recibirlo con fe. La llama del Espíritu trae fuego, es un momento sagrado para entrar a una nueva etapa, y un nuevo impulso para la obra de Dios en nuestra vida. No es una simple revelación, hay que estar listos para recibir la gracia de Dios. Hay que vivir en apertura frente al llamado divino del Espíritu. Es un tiempo pr...