El Principito IV Comienza el encuentro, las confidencias
¿Por qué el
Principito hace preguntas y no da respuestas?
23 min. El
piloto parece una persona normal, con cierta capacidad económica para tener un
avión propio. La opción generosa del piloto lo elevó de nivel y lo dispuso a
encontrar una relación de encuentro. Se crea una relación estrecha. Acoger, responder
con cordialidad. Hay varias condiciones para el encuentro: generosidad que
lleva a la confianza (confío en él, en tu fidelidad hacia mí), esto nos lleva a
hacer confidencias. La confianza produce fidelidad. No se hacen confidencias si
no te fías. Confianza significa hermandad. El Principito le cuenta sus errores.
La flor significa una persona (no supe comprenderla). Muy pronto se arrepiente,
pero la flor será su referente. ¡Las flores son tan contradictorias! Tuvo un
impulso y la dejó. Para encontrarse hay que tener paciencia. Todo lo que va a
buscar es el bien amar. Todo viaje es un riesgo y él va en busca de amigos. El
farolero no se preocupaba tanto de sí mismo, se afanaba en encender la luz,
pero era tan pequeño ese mundo que cada rato tenía que encender y apagar el
farol. El bebedor baja a un nivel inferior. La fiesta es una ebullición de
vida, la bebida lleva para abajo. El geógrafo fija la altura de las montañas y
mira a lo material, pero no de las relaciones humanas.
El
Principito comete errores, pero los supera porque busca un ideal: el encuentro.
Hay que ir poco a poco, hay que ajustarse a los ritmos naturales. Sube una
montaña y dice: “Quiero amigos”. Se oye el eco. Cree que no tienen imaginación.
Baja de la colina. Vio en una pradera miles de flores semejantes a la suya. Las
miró conforme al criterio de la oferta y la demanda. Eso es nivel 1. Cree que
su flor pierde su valor. Aparece el zorro, que representa la inteligencia. Y le
dice: “Tu flor era única porque es la que tú has cuidado”.
20 min
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