En donde estamos sobre las lunas eclipsadas. Gladys Mazzei

 

https://youtu.be/wFwykks1XU4

Mundo Católico

Mayo 16 y noviembre 8 es el periodo entre una luna roja o eclipsada y otra: son un preámbulo de lo que va a venir.

Las cosas están avanzadas. El tiempo se ha acortado. Detalles del Aviso: Hay oscuridad en la Iglesia Católica. Hay quienes la quieren adaptar al modernismo, y eso es pésimo. Desde la misma enseñanza a nuestros niños se deteriora la humanidad. Hay quienes desde los más altos niveles observan y abren puertas a los chamanes y males. Hay fieles que rezan y ayunan, pero no siguen a la Iglesia tal cual Cristo la fundó. El Aviso viene del Señor –un juicio antes del Juicio-, y algunas personas van a necesitar ayuda pues van a pensar: “Yo quiero conocer a mi Señor, al que ofendí”.

No se trata de salirnos de la Barca (Iglesia). Al contrario, entrar al lugar íntimo, a donde está el sagrario. Tener la Biblia en mano, conocer a Jesús (Evangelio), aumentar la fe a través de los sacerdotes buenos. Dar buen ejemplo. Si no conocen a Jesús, ¿cómo van a saber? Hay que prepararse y convertirse ya y ahora, porque viene la oscuridad y va a ser demasiado tarde. Señor: ¡Yo sostendré a los míos! Si les pasase cosa alguna es porque yo lo permito para bien de mi Iglesia. La Iglesia tiene las enseñanzas y hemos de llevarlas al corazón. Ya no estará escrita en papeles sino en el corazón.

El ataque va a venir de todos los lados: Familia, fe, etc. Van a venir por nuestros hijos a través de las escuelas, se les dará una doctrina tergiversada.

Van a censurar programas y canales católicos. Vamos a ver idolatría, homosexualismo, arrogancia, egoísmo… Todos nacimos con ciertas tendencias al pecado, pero lo que Dios no acepta es obrar en el pecado.

El Señor dice en qué momento nos encontramos, en un momento crucial por la oscuridad en la Iglesia. Estas dos lunas han mostrado la oscuridad en la que se ha metido la Iglesia Católica. En vez de modelo ha sido vía para que muchos se pierdan. Lo de Alemania va a ser retomado por muchos obispos. Esta oscuridad dentro de la Iglesia, termina en donde estamos, en el Pre-Aviso. Hay muchos que quieren abrazar las ideologías del mundo y de Alemania.

La Iglesia es luz porque Cristo dejó el fundamento para que así lo sea. Se pierde la Iglesia, se pierde la esperanza. La Iglesia se mantiene en los fieles.

Antes éramos prudentes al hablar de la sexualidad a los hijos de 6 y 8 años. Hay que hablarles de quién es nuestro Señor, de la diversidad de ideas y de ideologías. Van a estar expuestos a estas cosas.

La salvación es un proceso.

Este es el año de la decisión.

Ya no hay tapujos para hacer el mal.

Las puertas de la misericordia están abiertas. Dios nos dice: “En mi Hijo está la salvación.”

- Yo amo a Dios a mi manera-, dicen muchos.

Falta conocimiento de Dios. Es el momento.

Habrá una desolación pronunciada. Estamos casi solos.

No queremos imponer nuestra fe, sino leer la Biblia, recogernos y meditar. Podemos vivir una vida sana y en convivencia, pero hay que renunciar al pecado.

Dios quiere que nos volvamos a Él. Dios tiene codas fantásticas para nosotros. Habrá dolor, nos va a costar. Buscaremos la esperanza, y la esperanza nos huirá si estamos en pecado. El pecado ha traído tinieblas a la tierra, sólo hay un rayito de luz, que se hará más pequeñito. El que se convierta encontrará la luz. El pecado ha llegado a su más alto límite. El hombre se ha traído tragedias a sí mismo, porque no deja el pecado.

El Señor nos dice: “Vuélvanse a Mí”. Este es el momento.

Salir del adulterio, del pecado contra natura, del egoísmo.

Vamos hacia un Reino definitivo, permanente: El Reino de Dios.

El Señor nos dice:

1. El mundo no se va a acabar.

2. El Señor ya estableció su Reino en el mundo. Su Reino está en los que tienen presencia de Dios, rezan y viven en estado de gracia. Todo se nos dio en Cristo Jesús. Nadie se salva si no es por el Hijo de Dios. Dios es el mismo, ayer, hoy y siempre.

3. Dios mandó a su Hijo para siempre. Murió por todos, por los que obedecen su voz. Vivir los 10 Mandamientos.

Dice Gladys: El pueblo de Dios no discrimina. Teresa de Calcuta portaba el agua de vida, que es amor y sanación. Juan Pablo II tuvo una vida dura, pero dejó cosas muy buenas, como la Teología del cuerpo. Dar testimonio, dar la mano. Cuando llegue la hambruna, hay que ayudar. Consagrar los hijos a Dios. Ofrecer penitencia. Hay muchas maneras de reparar. Las madres buscan que sus hijos no se salgan del camino. Ama a tus hijos, pero no los minimices. Este es el momento de elevar los ojos al cielo. Los padres colocan la semilla, ellos deben nutrirse y hacer buenas obras.

Hay que actuar ahora, porque ya no habrá tiempo de conversión. Buscar el arrepentimiento. Cambiar la actitud soberbia y dejar el pecado. Deja el adulterio, lo más importante es la salvación. Tenemos que dejar el pecado, para que el Señor pueda ayudarnos. Lo que protege es el rezo del Rosario. Tenemos que aprender a decir que no. Va a entrar la idea de que todas las religiones llevan a Dios, y no se puede decir nada porque le llaman discriminación. Hay una iglesia luciferina. Hay confusión grande. Una cosa es abrazarnos como hijos de Dios, y otra la confusión. Ya estamos en plena confusión y va a crecer.

Los jóvenes son las doncellas de Dios, son lo más precioso. Aunque hayan pecado con su cuerpo, pueden volver a Dios por el Hijo. Vayan y busquen a Jesús. Necesitamos entrar en la familia del Hijo de Dios, sino no podremos pasar la prueba que viene.

El Señor trae algo extraordinario para quienes rectifican. El hombre se va a encontrar con un abismo impresionante, sólo Jesús te puede ayudar a cruzar ese abismo. Madres: Pidan gracia para sus hijos. Vamos en dirección a mejores tiempos. Hemos de perseverar en la fe y en la oración.

Si nos distanciamos de Dios, hay dolor, angustia, desazón. Reacciona. No te atrases. El hombre se ha hecho un pedestal de sí mismo y de las cosas del mundo. ¡Bájense de allí, ya! Se va a derribar en el tiempo del Señor. Hay todo un Cielo trabajando a favor del pueblo de Dios con toda su fuerza, con todos sus santos y ángeles. Oremos por la gente que pueden estar en pecado, porque pueden ser los convertidos que van a llevar la buena nueva.

Dios no viene a imponer sino a invitar. Él no vino a condenar. Nos invita a dejar al hombre viejo. Frena en seco, el Señor te quiere dar todo el gozo que buscas. El que busca, encuentra. Si tienes inclinaciones fuertes, dirígete al Señor: “Quiero oír tu voz”. Persevera en esta oración. Por la fe se gana terreno. En el acto entra el mal.

El Día del Aviso nos va a llegar en un momento oscuro. Vamos a sentir que no tenemos la asistencia de Dios, por el pecado, pero sí tenemos esa asistencia, sin la buscamos.

No hay que temer. El Señor nos va a ayudar, no nos deja solos.

¡Jesús es el Señor!

Leer el Cantar de los cantares en el Antiguo Testamento. Es un canto de Jesús a la Iglesia renovada.

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