Fortalecer a México

 

Tenemos que volver a la época en que la gente decía: “Cultiva tu alma mirando a las estrellas”. Hay que conocer las raíces de nuestra cultura, reaprender de nuestra historia, sentirnos orgullosos de lo que fuimos y de lo que somos, el pasado es el sostén de lo que un día seremos.

Margarita Torres, historiadora, explica: Si quieres destruir un país debes romper su amor a la Patria para que los ciudadanos no luchen por ella, se mina su capacidad de defensa; los valores tradicionales como el amor a la familia, que implica defendernos de la ideología de género y defensa de los valores.

Hay que intentan la solidaridad, donde los pobres son bienvenidos, en donde todas las razas son bienvenidas. Y a los opositores hay que respetarlos.

La sociedad necesita despertar para que vean lo poderosa que es y recupere lo perdido.

En Rusia, Putin es visto como el salvador de la esencia rusa. La 2ª Carta a los Tesalonicenese (2,6-7) habla del katejón, que es el obstáculo que frena la manifestación del anticristo. Muchos patriarcas ortodoxos ven a Putin como el katejón, es decir, como el que detiene el mal, el último bastión de la fe, el presidente que fomenta la natalidad y tiene políticas conciliadoras, y es el último bastión de la fe. Putin ha hecho crecer a Rusia porque ha hecho crecer económicamente a la nación y recupera la importancia de su cultura y su historia que es esencial -ve lo bueno y lo malo-, así, esa sociedad es indestructible.

En Rusia hay mucha libertad religiosa, ya que la élite ve la religión como un factor aglutinador de la sociedad, pero otras ideologías les crean problemas cuando les sugieren odiar a los que no piensan como ellos. Putin parte de una idea suya: “Hagamos a Rusia grande de nuevo”.

Lo sano es defender la diversidad: de religión, de raza, de cultura, de pensamiento, de orientación sexual, etc. Si el pueblo tiene valores e integridad, puede defenderse. Ahora bien, hay una guerra a otro nivel, que es una guerra espiritual.

La debilidad actual

Si el alma tiene cada vez menos importancia para el hombre actual, si se arrincona al espíritu, cuando te miras hacia adentro eres un recipiente vacío que se puede llenar de otras cosas. Si te has vaciado libremente de valores vendrá otro para que “compres” el pensamiento único -el totalitarismo- que ya está programado, con el pensamiento único. ¿Qué nos queda? Ser un muro de contención.

Hay que hacer la labor de frenar ideologías destructivasCuando vengan esas hordas del mal de lo políticamente correcto, podemos ser, efectivamente, un muro de contención. Si nos mantenemos fieles a nuestra esencia somos indestructibles.

Nos hace falta reflexionar en lo que pasa. Muchos quieren que el hombre sea el centro y piense en sí mismo. Proponen: El hombre tiene que cuestionarse, cuestionar su identidad, tiene que dudar de sus padres y repudiar a la generación que le precede y repudie a la generación que viene después. Ellos piensan: “Si el mundo tiene valores, tenemos que lograr la depravación de los valores, porque son un freno a nuestros objetivos”.

Juan Antonio Aguilar, experto en geopolítica afirma que la inteligencia artificial puede ser una herramienta para lograr el totalitarismo. Las potencias emergentes se han puesto de acuerdo: China, Rusia, Irán, Corea del Norte. China y Rusia pueden dominar Eurasia y, con ello, el mundo. América y Australia son como dos islas.

Estamos viviendo una confrontación ideológica entre un mundo artificial y uno real. La verdadera guerra es mental y espiritual. Si entregas tu alma, pueden hacer contigo lo que quieran.

Ahora mismo hay un enfrentamiento cultural, éste es terriblemente duro. La gente por libre albedrío se dedica a drogarse, para ello hay que legalizar la droga porque se trata de que la gente no piense. En India hay valores, se ve que hay que destruirlos. Que los jóvenes tengan el tiempo lleno para que no cuestionen ni crezcan como personas. Que coma lo que está planeado; que la gente se alimente transgénicamente de lo que se le pone delante.

La simbología usada en los juegos olímpicos pasados, nos muestran por donde van las ideologías.

Los musulmanes tienen respeto por los mayores, cosa que se ha perdido en Europa y algo de eso pasa en América en menor escala. En la realidad alternativa, todos tenemos cabida.